Es una persona muy reflexiva, que medita mucho las cosas antes de tomar una decisión y actuar. Su capacidad de análisis y su habilidad para llegar al fondo de las personas hacen de Mireya una mujer muy dotada para ayudar al prójimo, en tareas psicológicas o de asistencia social, sus amigos suelen desahogarse con ello y le piden consejo a todas horas. Deja el amor en segundo plano.